Analizando las propuestas de los dos candidatos en materia ambiental, concluimos que carecen de un derrotero efectivo. No se trata de hacer una “lluvia de ideas” sobre los “compromisos” en materia ambiental. Se trata de ver el tema ambiental en el marco del cumplimiento de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030 de la ONU, en todos los campos, con especial énfasis en la Sustentabilidad Socioambiental como eje transversal fundamental. Sobre esta base, y como aporte, los compromisos que necesitamos son los siguientes:
1. Trabajar arduamente en la disminución efectiva de la pobreza en varias dimensiones, incluyendo la ambiental, en el entendido de que son las comunidades más pobres las más vulnerables a los desastres naturales y el cambio climático.
2. Impulsar una gestión efectiva en el desarrollo de una agricultura familiar libre de transgénicos y ecológica, que garantice al país el autoabastecimiento. Desarrollar acciones para que la actividad agrícola intensiva y extensiva se adhiera a cumplimientos ambientales ecológicos de modo que disminuya y corrija su impacto ambiental.
3. En razón de que uno de los recursos naturales más importantes y estratégicos del país es su agua, principalmente el agua subterránea, se debe realizar un ajuste integral de la normativa para el uso, manejo sustentable y protección de los acuíferos, que resuelva de manera efectiva el conflicto de la aplicación de la Matriz del SENARA y de sustento a las entidades que administran y suplen los recursos hídricos, como las ASADAS, para que suministren agua pura para garantizar la salud de las comunidades e impulsen el desarrollo socioeconómico de las mismas.
4. A sabiendas de que Costa Rica, como el resto de Centroamérica, se localiza en una de las regiones del mundo más vulnerables al Cambio Climático, se dará impulso al desarrollo de programas de educación ambiental en Gestión Preventiva del Riesgo, así como el desarrollo de un Seguro contra Desastres que garantice la sostenibilidad del país ante el eventual embate de un desastre natural.
5. Capacitar a las mujeres campesinas e indígenas, líderes de familia, en el desarrollo de agricultura ecológica y aumentado su resiliencia.
6. Continuar impulsando y acrecentando el desarrollo de energías renovables, particularmente la energía solar. Trabajar arduamente por disminuir la factura petrolera del país, para sustituir la importación de combustibles por fuentes energéticas propias, como la solar, la geotérmica de baja entalpia (fuera de parques nacionales) y el desarrollo de biocombustibles, entre otras. Desarrollar una apertura controlada del mercado eléctrico para darle más competitividad a la industria. Crear el Servicio Geológico de Costa Rica que, como parte de sus funciones, realizará investigación de recursos geoenergéticos que, en caso de existir, se utilizarán como una fuente firme transitoria de energía.
7. Aprovechando la información ambiental ya desarrollada, impulsar fuertemente el desarrollo turístico sostenible en las zonas costeras del país, por medio de planes de ordenamiento territorial regionales que acelerarán de forma ambientalmente sustentable el desarrollo de las provincias costeras.
8. Acelerar e incrementar el desarrollo y la inversión en el país, pero de forma ambientalmente sustentable, sobre la base de una correcta y eficiente Evaluación de Impacto Ambiental, Ordenamiento Territorial y Planificación Estratégica (sectorial y suprasectorial) con el uso de la Evaluación Ambiental Estratégica, tal y como lo ha ordenado la Contraloría General de la República, de manera tal que la sociedad, por medio de sus diferentes sectores, participará activamente en el desarrollo de decisiones estratégicas clave para nuestro futuro.
9. Impulsar aceleradamente los lineamientos de la Nueva Agenda Urbana, no solo en la Gran Área Metropolitana, sino también las ciudades intermedias fuera del Valle Central. Se corregirá y dará dimensión ambiental a la normativa de uso del suelo y de construcciones, se iniciará la ejecución del Tren Rápido de Pasajeros, se desarrollará la Sectorización, se eliminarán los “nudos de tránsito” más conflictivos, acelerar el uso de parque automotor eléctrico, se dará cabida al desarrollo urbano vertical y ecológico, recuperando áreas verdes, espacios urbanos, tecnologías de recarga acuífera, limpieza de ríos, reforestación de zonas montañosas, ciclovías y autoabastecimiento con el uso de energía solar.
10. Iniciar el proceso de cambio, para disminuir el consumo de plaguicidas y transformar nuestra agricultura hacia una actividad ecológica y sustentable. Impulsar la jerarquización del manejo de residuos sólidos y el desarrollo de rellenos sanitarios ambientalmente bien manejados en vez de la incineración de los residuos. Impulsar la cultura del no uso del plástico y su sustitución por productos biodegradables. Trabajar arduamente en el transformar nuestros ríos en fuente de vida y parques urbanos para el disfrute de las comunidades.
11. Tomar acciones efectivas en la lucha contra el Cambio Climático: Ordenamiento Ambiental del Territorio, identificación de Zonas Especiales, Ordenanzas Municipales, Gestión (preventiva) del Riesgo, Seguro contra Desastres (nacional e internacional), Planificación Estratégica (sectorial y suprasectorial). Trabajar en aumentar la Resiliencia de nuestro país al Cambio Climático y a otro tipo de desastres naturales.
12. La Zona Económica Exclusiva, nuestro mar patrimonial, tendrá una atención especial. Se garantizará la recuperación y la salvaguarda de la biodiversidad marina, en particular la del Domo Térmico de Costa Rica. Se modernizará el sistema de licencias de pesca de atún, para dar sostenibilidad al aprovechamiento de este recurso. Se reforzará el sistema de guardacostas como baluarte de la protección de nuestros mares. Se prohibirá el aleteo del tiburón y su exportación, se obedecerá a la Sala Constitucional con la prohibición a la pesca de arrastre, y se darán soluciones efectivas a los pescadores artesanales para que dispongan de verdaderas alternativas laborales que sean sostenibles y garanticen su calidad de vida.
13. Convertir a nuestro país en la primera potencia mundial en biodiversidad, ecoturismo y desarrollo sustentable, para que sea un ejemplo a seguir por el mundo, particularmente aquellos países en vías de desarrollo. Fortalecer el Sistema de Áreas Silvestres Protegidas (ASP) por medio de alianzas público – privadas (ONGs), que permitan mejorar los ingresos y la inversión en la protección de estas zonas. Ordenamiento Ambiental del Territorio para salvaguardar las ASP y corredores biológicos. Fortalecer el sistema de pago de servicios ambientales para que, además de mantener áreas boscosas, pueda recuperar bosques en zonas de aptitud forestal degradadas.
14. Dar total transparencia a los procesos de permisos, autorizaciones y licencias que se tramiten ante el Estado, por medio de la información fluida y abierta. Se creará el Sistema Integrado de Protección Ambiental (SIPA) del Estado, que genere una ventanilla única, de forma que ahorre recursos, agilice trámites y de seguridad jurídica. Debe complementarse con el Ordenamiento Ambiental del Territorio y en la aplicación e implementación del Principio de Responsabilidad Ambiental compartida basada en declaraciones juradas y un sistema eficiente de control.
15. En el ámbito diplomático, dar particular prioridad al compromiso abandonado por más de 20 años, de trabajar con Nicaragua, en un Plan de Desarrollo y Sustentabilidad Ambiental para la cuenca binacional del Río San Juan, la más extensa en Centroamérica. También, se aprovecharán los foros regionales en el SICA y la CCAD para estrechar lazos de cooperación ambiental y en gestión preventiva del riesgo con los otros países centroamericanos y República Dominicana, para aumentar la resiliencia ante el Cambio Climático y los Desastres Naturales, impulsando el desarrollo de un Seguro Regional contra desastres.
Todo esto es posible y realizable. Su ejecución permitiría enrumbar al país hacia el progreso, no solo en el campo ambiental, sino en cumplimiento estricto de los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030 de la ONU para transformar nuestro mundo y, sobretodo, nuestro futuro. Es hora de que desarrollemos la visión del progreso de nuestro país en materia ambiental más allá de viejos y repetitivos lemas de campaña, que no dan respuesta a los urgentes desafíos cuya solución ha sido postergada una y otra vez durante las tres últimas administraciones.